Descripción
Reseña al libro Metztli de Xánath Caraza
Por Juan Mireles
Xánath Caraza es una escritora que encuentra en los lugares, sus historias. En cada uno de sus cuentos nos invita a entrar a su casa, la de sus recuerdos, de los viajes; la comida y tradiciones de un México al que vienen cada tanto para probar lo que no olvida nunca: los olores y los sabores que le devuelven las imágenes, los diálogos, las historias, el amor, que la significan.
En Metztli no se permite olvidar que la distancia es sólo una pausa, que esa lejanía sirve para reafirmar sus raíces: un motivo para volver siempre, como no puede ser de otra manera, porque la tierra llama.
Kansas City para Caraza es otra casa, en la que habitan otras personas, otros nombres, otras sombras que necesitan ser escuchadas a través de sus historias para revelarnos sus dificultades: el ser ajenos a esa patria, esa otra América, como se revela en el cuento “Ciudadanía”.
Metztli es, también, un diario en el que varias ciudades del mundo se recorren (como en “Ascalapha odorata”) para encontrar la pasión y al hombre, al amante, al suyo, al que busca en las vivencias, en la escritura. El amor adquiere cierto volumen en varios de los cuentos que se reúnen en esta obra. El amor que nunca termina por establecerse y, sin embargo, se eterniza a través de las palabras, de los poemas, de los textos que escribe la narradora.
En esta obra el arte y los libros cobran importancia, son parte de un momento, de un acto, que sirven para contextualizar ciertas cosas que en muchas ocasiones se agradece –el arte nunca sobra, por el contrario, alimenta.
La música, la poesía, el teatro, la literatura en general, están presentes en estos cuentos, tanto, que podremos ser testigos de cierta interacción que existe dentro de la obra Pedro Páramo en el cuento “Murmullos”.
Esta edición bilingüe, traducida por Sandra Kingery y Kaitlyn Hipple, es el primer libro que Xánath Caraza (con varios libros publicados en Estados Unidos y otras partes del mundo) publica en México, logrando así una conexión con el lector mexicano que, sin duda, sentirá una cercanía, no sólo con la gente radicada en México sino con los compatriotas (Xánath misma) que están del otro lado de la frontera, entendiendo a México y a su gente, desde otra óptica.