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RESEÑA:
En tu nombre: un duelo poético
Sobre el poemario En tu nombre de Mario Islasáinz
Por Juan Mireles
“Que nadie venga a decirme/que estás muerto/que nadie se atreva tan sólo/ a sugerírmelo”. Así inicia el libro En tu nombre del poeta Mario Islasáinz, una obra que se escribe desde la profundidad del dolor y el miedo que produce el vacío, la ausencia de aquello que nos significaba una suerte de equilibrio.
Esa circunstancia, esa orfandad que fragmenta y se esparce en una infinitud negrísima. Y desde esa oscuridad, los ojos del poeta se van abriendo paso. Los accesos adquieren el volumen necesario para dejar sobre el papel “tanto dolor”. Contarlo todo para sanar y salvarse de la atracción de la muerte: la poesía.
Mario Islasáinz expresa el amor de un hijo hacia un padre desde el mejor camino posible: el de la desnudez sensible de las emociones. El desahogo sin importar nada, sin máscaras, sin poses poéticas. Es la voz de un hombre que ha visto a su padre morir lentamente en una cama de hospital, con tubos para la respiración asistida que nada pueden hacer cuando el otro lado se vuelve una presencia cercanísima.
En tu nombre se vuelve un recuerdo y una reflexión y, en ocasiones, reproche y culpa. Los estados del duelo el autor los logra volver vivenciales, tan reales que otros padres y otros hijos lograrán acercarse a sus fantasmas.
Mario Islasáinz alcanza a su padre con este libro. Lo abraza y lo besa, y se recuesta junto a él para decirle que ya nada importa, que sólo queda rememorarlo, no olvidarlo para que no se muera nunca.
Don Mario es “el ser más vivo de todos los muertos”, y el poeta lo dice de tal forma que el libro logra la confirmación de la inmortalidad del padre -parecería que el poeta con esta obra confirma el no olvido, porque olvidar significa dejar ir, quedarse solo.
“Qué bello eres” escribe el autor, escribe la poesía que certifica el reencuentro. Esa unificación que se le escapa a la muerte –en la fragmentación del tiempo y su dispersión habita la muerte; no la muerte como una finalidad sino aquella que aleja por completo el significado de la vida.
En tu nombre es una aproximación a la belleza del sentir humano, el dar y darse como diría el autor, para hallar el amor y ofrecerlo desde la inocencia, desde ese volverse niño para amar desinteresadamente.
En tu nombre es una búsqueda, tal como lo dice el poeta en uno de sus versos: “Vine a buscarte porque el silencio/te encerró en el escondrijo más raro”, esa rareza que se va disipando en cada línea de este inmenso poema.
