Descripción
RESEÑA:
Seguir los Rastros del tiempo
“Encarnación Jiménez, después de cuarenta y siete años de obligada ausencia, es impulsado por el sentimiento de la nostalgia a regresar a su natal Zaragoza de las Peñas. ¿El propósito? Rastrear los vestigios de su propio origen, el de su familia, y rescatar la historia de Juan, uno de los hijos de Martín que sobrevive a los embates de la Jamila”.
Matilde Jamila, la que ronda, acecha y persigue a los hijos de Martín y a su familia, porque los quiere despojar de todo, de la herencia. A Matilde la mueve la venganza y una ambición que toca la vida de cada uno de los personajes de la novela.
Rastros del tiempo se desarrolla en Zaragoza de las Peñas, en el pueblo de Nautla y la exuberante vegetación del río Bobos; Martínez de la Torre, Perote, El Coyolillo, Casitas y San Rafael también serán escenarios en donde las historias van tomando su cauce y significado.
Es una novela de fantasmas, realidades, supersticiones, sugestiones y violencia, pero de igual forma, nos describe las tareas y la vida en el campo, nos habla del amor de familia, de sueños, de superación, talentos y sensibilidades.
Rastros del tiempo es una historia en la que el lector encontrará realidades de un México que está más allá de los grandes edificios, de la revolución del internet, de esa modernidad que se concentra en las grandes ciudades. Aquí, el autor nos recuerda la naturaleza, la aventura, pero igualmente los obstáculos que la gente de esos lugares tiene que sortear para salir adelante y superar las circunstancias.
Entrar a esta novela es dejarse atrapar por los murmullos de los fantasmas, por los rastros que se van siguiendo en cada página; una historia que no tiene prisa por contarse.
